lunes, 9 de julio de 2012

Domingo de fiesta (como siempre)

El sábado trabajé mucho y, entre otras cosas, puse algunas de las pacas que sobraron del año pasado ahí, pegadas a la pared, para hacer cuadra en el futuro.
Pero Cuco y Chispa decidieron que estaban mejor esparcidas por ahí adelante, que así ellos meten la nariz y arrancan algo que les gusta...
Aunque yo me preocupa cada día de tenerles un tractorcito de hierba fresca, cortada del sábado.
Hay trabajos diarios, porque todos comemos cada día.
Porque yo creo que los seres vivos disfrutamos comiendo. Yo soy de las que vivo para comer, no me coformo con comer para vivir.  Ahí, puré de patata con acceitunas, ensalada de huevos cocidos y remolacha y postres (tarta de chocolate de mi hermana, nísperos y ciruelas que trajo Pili).
Brevas, especialmente dedicadas a Pili, que le encantan.
Empanada, también en exclusiva para la invitada.
El asado, recurrente . Mi hermana dice que me supero cada día (a mi no me lo parece, porque es tan habitual que ni caso le hago, al pobre del asado)
Champan de mi cuñado, que aun nos dura.
Y, nuestra fama de borrachitas es tan grande, que hasta la tarta helada que trajo Pili tiene forma de botella...
con corcho de nata y chocolate
y ese delicioso interior...venid a acabarla